Pero, en serio, ¿qué le pasa a la gente con los andaluces?

Para mí ser andaluza es un orgullo, pero nunca he llegado a pensar que serlo podría despertar la envidia de otros. No encuentro otra explicación que no sea la envidia, porque a ver si no esa manía que le ha entrado a todo el mundo de meterse con nosotros los andaluces.

Primero el catalino tonto que se empeña en decir que no pagamos -poco, digo yo- y que no hay quién lo baje del burro. A ese individuo lo ponía yo a trabajar, si es que encuentra algo, en una empresa pequeña, con una miseria de sueldo y ¡hala! a que te quiten IRPF y Seguridad Social por un tubo. Ya lo puse de desgraciado y sigo pensando lo mismo, lo que pasa es que ahora añado lo de pobrecito de mente y pardillo. Bueno, pues ahora se le antoja a una idiota del PP de decir que los ordenadores portátiles de los colegios los puedes comprar por 50€ en un mercadillo de Málaga. A mí me surgen las siguientes dudas existenciales:

1.- ¿Qué hace una concejala del PP de Madrid en un mercadillo de Málaga?
2.- Si los ordenadores se venden en el mercadillo, ¿los venden en el puesto de al lado de las bragas de la Pantoja o del de los sujetadores de la Esteban?
3.- ¿Se podrá regatear el precio o los venderán con un CD del Chiquetete de regalo?
4.- ¿Dónde está ubicado el mercadillo de Málaga? Yo es para ir y comprarme.... unas bragas y un sujetador (ordenador ya tengo, eh?)

No es que yo esté muy de acuerdo con la política (inexistente) de educación de la Junta. Más bien es des-educación, pero se están pasando veinte pueblos con lo de criticar a los andaluces. Ya está bien, joder, que es cansino. Vamos a tener que editar un manual para politiquillos de Despeñaperros para arriba, en el que se especifique cuáles son los inútiles que nos gobiernan a los andaluces, con el fin de que se dirijan a ellos personalmente, sin tener que generalizar.

Porque es por culpa de estos incultos de tres al cuarto que nos meten a todos en el mismo saco. Dios me libre de considerarme una persona culta o inteligente (aunque soy lo bastante lista como para no meterme en política), pero son ellos los que nos dan mala imagen a los demás. Hay gente que trabaja muy duro y hace todo lo posible por sacudirse el sambenito de flojo, inculto y juerguista que tenemos cada uno de los andaluces colgado. Cierto que los hay, que , como dice la gente "hijoputas hay en tós laos", pero son los menos. Vuelvo a reivindicar la riqueza de nuestra cultura, la sabiduría popular, la simpatía y bonanza de nuestro carácter, y las ganas de disfrutar de la vida, y de saber vivirla.

¡Que nos dejen en paz de una vez! Que aprendan ellos a vivir como hemos tenido que aprender nosotros, a base de señoritos de cortijo que han tratado a la gente con la punta del pie, de políticos rastreros que han robado el dinero de todos sus conciudadanos, de funcionarios tocahuevarios y tocacojones (ya sabéis, igualdad) a los que, cuando les pides que hagan su trabajo, te miran con odio y actúan como si estuvieran otorgando gracia divina. Aprender a base de déspotas y demagogos que se escudan tras las siglas de un partido (escoged a vuestro gusto), de olvidos, de desprecios. Y aún así, reímos, disfrutamos de la familia y los amigos, de lo poco (o mucho) bueno que nos da la vida.

Lo siento, pero los andaluces somos únicos, y no tenéis la capacidad mental -ni los cojones- de ser como nosotros. ¡¡OS JODÉIS!! Y además "LA ENVIDIA E MÚ MALA"